Las colonoscopias en las mujeres más jóvenes pueden reducir de forma significativa el riesgo de cáncer de colon, afirma un estudio reciente.
“Si bien ha habido un aumento alarmante en la incidencia del cáncer colorrectal en las personas más jóvenes durante las últimas décadas, las pruebas de detección se han centrado en gran medida en las personas mayores de 50 años”, anotó el Dr. Andrew Chan, autor sénior del estudio, gastroenterólogo y epidemiólogo del Hospital General de Massachusetts.
El cáncer de colon es la tercera causa principal de muerte por cáncer en Estados Unidos, tanto en los hombres como en las mujeres. Aunque el número general de casos de cáncer de colon ha disminuido, las tasas entre las personas menores de 50 años aumentaron en un 51 por ciento entre 1974 y 2013.
En los últimos años, la Asociación Americana Contra El Cáncer (American Cancer Society) y el Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de EE. UU. han recomendado iniciar las pruebas de detección del cáncer de colon a los 45 años.
Chan y sus colegas analizaron los datos de alrededor de 112,000 mujeres estadounidenses del Estudio de salud de las enfermeras II. Encontraron que las mujeres que habían comenzado las pruebas de detección a los 45 años tenían un riesgo entre un 50 y un 60 por ciento más bajo de desarrollar cáncer de colon que las que no realizaron las pruebas.
Además, las personas que realizaron las pruebas de detección entre los 45 y los 49 años tenían unas tasas mucho más bajas de cáncer de colon a los 60 años que las que iniciaron las pruebas entre los 50 y los 54 años, según el estudio.
Aunque los hallazgos son en mujeres, es probable que los mismos beneficios apliquen a los hombres, según Chan.
“Nuestro trabajo aporta los primeros datos de este tipo, que muestran que iniciar las pruebas de detección a una edad más temprana puede reducir el riesgo individual de cáncer colorrectal y la incidencia general de cáncer en la población, demostrando así el impacto substancial de las pruebas de detección tempranas, tanto a una escala individual como poblacional”, planteó Chan en un comunicado de prensa del hospital.
Los hallazgos se publicaron en la edición del 5 de mayo de la revista JAMA Oncology.
La colonoscopia es un procedimiento invasivo, pero también hay disponibles pruebas no invasivas de detección basadas en las heces.
“Cualquier inquietud que los médicos puedan tener sobre la efectividad de las pruebas de detección del CCR [cáncer de colon] a una edad temprana, con suerte se disipará gracias a estos resultados”, afirmó Chan.
“Nuestros datos muestran que disponemos de una herramienta eficaz para abordar la epidemia de cáncer colorrectal entre los adultos más jóvenes y, con suerte, esto alentará a los médicos a hablar sobre las pruebas de detección con sus pacientes más jóvenes lo que, a su vez, los motivará a dar seguimiento y realizar las pruebas”, concluyó.