Las pastillas anticonceptivas que contienen tanto estrógeno como progestina no contribuyen al crecimiento de unos senos agrandados en las adolescentes y mujeres jóvenes, y podrían en realidad asociarse con el desarrollo de un agrandamiento de senos menos grave.
Las pastillas combinadas tampoco aumentaban el riesgo de un nuevo crecimiento tras una cirugía para reducir los senos, señalaron el investigador, el Dr. Brian Labow, y sus colegas. Labow trabaja en el Hospital Pediátrico de Boston y en la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard.
El estudio se publicó en la edición de octubre de la revista Plastic and Reconstructive Surgery.
“A pesar de los beneficios positivos de los AOC [anticonceptivos orales combinados], muchas pacientes, padres y proveedores se preocupan de que su uso pudiera empeorar la hipertrofia de los senos en las adolescentes”, comentaron en un comunicado de prensa de la revista Labow y sus coautores.
A veces, se realiza una cirugía de reducción de senos para reducir el dolor y los problemas psicológicos en las adolescentes y mujeres que tienen unos senos agrandados, o macromastia, explicó el estudio. En este mismo grupo de edad, la “píldora” combinada se puede recetar como anticonceptivo, o para gestionar el acné, las anomalías menstruales, la endometriosis o el síndrome de ovario poliquístico.
Los anticonceptivos pueden provocar retención de fluidos y sensibilidad o hinchazón en los senos.
Para estudiar si también contribuían al agrandamiento, los investigadores evaluaron a 378 pacientes, de 12 a 21 años, que se sometieron a una cirugía de reducción de senos en el Hospital Pediátrico de Boston.
La gravedad del agrandamiento se comparó entre las pacientes que habían usado las pastillas combinadas u otros anticonceptivos hormonales y las que no, junto con el nuevo crecimiento de los senos en el primer año tras la cirugía de reducción.
Los médicos compararon los hallazgos con los de un grupo de control de 378 pacientes de edad similar.
Las pacientes con unos senos agrandados tenían un uso más bajo de anticonceptivos hormonales en general, con un 38 frente a un 65 por ciento. Entre las mujeres que tomaban anticonceptivos, las que tenían senos agrandados fueron más propensas a que les recetaran la pastilla combinada, un 83 frente a un 53 por ciento.
Sin embargo, el uso de estos anticonceptivos no pareció afectar la gravedad del agrandamiento de los senos, encontraron los investigadores.
La cantidad mediana de tejido mamario extirpado durante la cirugía de reducción fue similar entre los grupos, según el estudio. En realidad fue un poco menos en las pacientes que usaron las pastillas anticonceptivas combinadas, en comparación con las que no usaron anticonceptivos hormonales.
Las puntuaciones de dolor y otros síntomas de unos senos con un agrandamiento grave, lo que incluye a la irritación de la piel de los senos, la dificultad para hacer ejercicio o problemas para encontrar ropa que se ajuste, fueron similares entre los grupos.
Dos años después, los investigadores no encontraron ninguna diferencia significativa en la tasa de nuevo crecimiento de los senos entre las pacientes que usaban las pastillas combinadas y las que no.
Alrededor de un 5 por ciento de las pacientes tuvieron un nuevo crecimiento de los senos tras la operación. Más o menos la mitad de los casos se debieron a un nuevo crecimiento en la glándula mamaria, en lugar de asociarse con un aumento de peso, según el estudio.
El equipo tampoco encontró un aumento en el riesgo de nuevo crecimiento de los senos en las mujeres que usaban las pastillas combinadas tras la cirugía de reducción de los senos.
“Aunque se necesita investigación adicional, se anima a los proveedores a pensar en los AOC cuando receten [anticonceptivos hormonales] a sus pacientes con macromastia cuando esté indicado y sea adecuado”, añadieron los investigadores.
FUENTE: Plastic and Reconstructive Surgery, news release, Sept. 29, 2022