La alopecia areata incógnita (AAI) es un tipo de alopecia no cicatricial cuyo reconocimiento como entidad es controversial, ya que algunos autores la consideran como parte del espec-tro de alopecia areata (AA)1, mientras que otros postulan que corresponde a un tipo diferente de alopecia. Se comenzó a utilizar este término desde 1987, luego de que Rebora et al1. describieran un patrón de caída difusa de cabello en pacientes con marcadores dermatoscópicos e histopatológicos similares a los encontrados en AA.
Clínicamente, se presenta como caída difusa de cabello no cicatricial, que puede o no comprometer la región facial, evo-lucionando a afinamiento del pelo y en ocasiones a áreas gla-bras2. Este patrón de alopecia es similar a lo observado en otras patologías como efluvio telógeno (ET) y alopecia andro-genética (AGA), sus principales diagnósticos diferenciales3. A la dermatoscopía, se pueden observar vellos cortos, puntos amarillos, puntos negros y pelos en signo de exclamación, los cuales también son hallazgos frecuentes en AA en parches, aunque no exclusivos de esta patología4-6.
Los hallazgos histopatológicos dependen del tiempo de evolu-ción. En la fase aguda, se observa un infiltrado linfocitario peri-bulbar en folículos terminales en estadios iniciales, o alrededor de pelos miniaturizados en episodios repetidos7. En la fase subaguda, se observa aumento de pelos en catágeno y teló-geno. Por último, en la fase crónica, se observa miniaturiza-ción del folículo con mínimo o ausente infiltrado inflamatorio7,8. Desde su aparición en la literatura, múltiples estudios y revi-siones han intentado determinar criterios clínicos, dermatos-cópicos e histopatológicos que permitan definir esta entidad, sin embargo, aún no se ha logrado consenso entre los diver-sos autores. A continuación presentaremos nuestra experiencia con algu-nos pacientes con un cuadro compatible con AAI que se pre-sentaron al Departamento de Dermatología de la Facultad de Medicina de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Casos Clínicos
Caso 1
Paciente de 15 años, sexo masculino, con historia de 3 años de evolución de caída de cabello difusa, en tratamiento con Minoxidil loción 5%, sin respuesta. Al examen físico, presentaba disminución difusa generalizada de la densidad capilar (Figuras 1a y 1b), sin pérdida de pelo en otros sitios, con pull test negativo.
Figura 1a y 1b
Disminución difusa de la densidad capilar, con pelos miniaturizados.
Se realizó videodermatoscopía, en la cual se observó la pre-sencia de vellos cortos (flecha), puntos amarillos y pelos con signo de exclamación (Figura 1c). Se solicitaron exámenes generales que resultaron normales y tricograma diferenciado que mostró aumento de proporción de pelos en fase telógeno (12% y 20%).
Figura 1c
Pelos cortos miniaturizados, puntos amarillos y pelos en signo de exclamación.
El estudio histopatológico mostró infiltración linfocitaria perifo-licular, folicular y fibrosis laxa concéntrica bulbar (Figura 1d). Los hallazgos fueron compatibles con AAI. Se inició tratamiento con Clobetasol 0,05% tópico y Minoxidil 5% tópico, con escasa respuesta luego de 14 meses de tratamiento.
Caso 2
Paciente de 34 años, sexo femenino, con antecedente de en-fermedad de Graves a los 16 años. Refería cuadro de larga data caracterizado por caída difusa de cabello, interpretada previamente como AGA, por lo que se indicó tratamiento con Finasteride 5 mg al día y Minoxidil 5%, el cual realizó por 13 meses, sin respuesta. Al examen físico, presentaba (Figura 2 a,b) disminución difu-sa de la densidad capilar, pelos miniaturizados, con pull testpositivo.
Por sus características clínicas, suele confundirse con EF o AGA3. El diagnóstico diferencial entre estas entidades puede convertirse en un verdadero desafío cuando se presentan cua-dros atípicos, por lo tanto, el estudio de estos pacientes resulta de particular relevancia. La videodermatoscopía es una técnica no invasiva que permite una rápida y detallada observación del cuero cabelludo con una gran magnificación y resolución de imagen, por lo que es considerada como una herramienta útil en el estudio y diag-nóstico diferencial de alopecia9. En AAI se observan con frecuencia puntos amarillos y vellos cortos, hallazgos sensibles aunque poco específicos de AA, asociados en menor frecuencia a puntos negros o pelos cada-véricos y pelos en signo de exclamación, que sí son más es-pecíficos de AA4,5,6 principalmente en fases agudas, ya que en fases crónicas predomina la observación de piel lisa y delgada, con aperturas foliculares que pueden o no estar obtruídas por tapones córneos9.